Esta nueva sección nos permitirá reconocer a los distintos profesionales que fueron de gran influencia e importancia para el desarrollo de la AAMR. En esta edición entrevistamos al Dr. Ramón Rojas, uno de los pilares del federalismo en la AAMR ¿Cómo fueron sus primeros pasos? ¿Cómo era la Asociación en ese momento?
¿Cómo fueron sus primeros pasos por la AAMR?
A poco más de un año de la firma del acta constitutiva de la AAMR (mayo 14 de 1999) pasé a formar parte de la Comisión Directiva desempeñándome – durante 2 períodos consecutivos- como vocal regional del NOA, tiempo en el que además participé de diferentes proyectos e integré nobeles comités, en pos de sustentar las bases de los reglamentos destinados a garantizar el desarrollo organizado y continuo de nuestra asociación.
Así, mis primeros pasos fueron buscando integrarme a una AAMR llena de desafíos e interrogantes, compartidos con 2 Comisiones Directivas, que con tiempo y sin apuro supieron empezar a encontrar las respuestas correctas.
¿Cómo era la Asociación en ese momento?
Por primera vez se pensaba en grande, en una asociación de carácter nacional, con miembros a lo largo y ancho del país, tratando de copiar y aprovechar las experiencias de otras sociedades científicas sin fines de lucro, que ya tenían su trayectoria en el país. Era tiempo de buscar el mejor modo de ampliar nuestra incipiente base societaria, con ofertas de servicios y de participación activa de sus miembros, aunque también eran tiempos difíciles, de limitaciones, con autonomía limitada, muy dependientes de la industria, con la mayor actividad científica centrada en un congreso anual y con los altibajos esperables de toda sociedad joven que debía sufrir las clásicas crisis de aprendizaje y crecimiento.
Los años fueron pasando y poco a poco la AAMR fue creciendo y fortaleciéndose de la mano de nuestros primeros presidentes hasta que un buen día alguien hecho a andar mi nombre como candidato a la vicepresidencia y allí empezó la historia. En realidad, antes de postularme a la vicepresidencia de la AAMR, pensé seriamente en lo que podrían significar mis próximos tres años, uno de vice, uno de presidente y uno a cargo de la organización y puesta en marcha del Congreso, pensé en mi familia, mi trabajo, mis colegas, en mi entorno, en los más de 1200 Km de distancia, que me separaban de la secretaría, del contador, del abogado, del resto de la comisión directiva, etc. Ahora sé que valió la pena.
¿Qué ideas tenía en mente para concretar en la Asociación?
Siempre me sentí identificado con la idea primordial de una sociedad de medicina respiratoria con espíritu e integridad netamente federal y dentro de este escenario con la idea de una sociedad descentralizada, independiente, participativa, de oportunidades y de servicios, tanto en lo científico como en lo social, para ser aprovechada por todos sus miembros. Una sociedad destinada a ser referente para toda la Argentina y con alcance y reconocimiento internacional. Por eso mis propuestas como candidato a la vicepresidencia y los esfuerzos compartidos con mi Comisión Directiva para que estas propuestas se cumplieran siempre estuvieron fundamentadas en esta idea de AAMR. Entrar en detalles entre lo cuantificable y calificable de nuestra gestión sería impropio de esta entrevista.
¿Alguna anécdota para compartir de ese momento?
Cómo no recordar nuestro 35° Congreso en San Miguel de Tucumán, realmente todo un desafío. Nuevamente la distancia, más de 1.200 Km de Buenos Aires aparecían como el gran limitante, pero también como la gran oportunidad de demostrar de que podíamos lograrlo. Como no detenernos un instante, buscar en la memoria de las cosas que nos hicieron felices y recordar ese 13 de octubre de 2007, un cielo tucumano oscuro y amenazante de una tormenta que nunca llegó -tal vez retenida por los rezos de todos los que nos esforzamos tanto, para que esa fuera una noche especial-, como no recordar el viejo patio de nuestra querida casa histórica, cuna de la independencia argentina y volver a sentir las estrofas del himno nacional, con los ojos húmedos inaugurando un congreso más de la AAMR.
¿Cómo ve a la AAMR en la actualidad?
Como una sociedad ya adulta, autosuficiente, con plena integración federal, participativa, productiva, respetada y reconocida, por su nivel científico, tanto a nivel nacional como internacional. Una sociedad que se encuentra con muchas más fortalezas que debilidades, cosechando lo que durante tanto tiempo y con tanto esfuerzo sembró, rica en logros científicos y en servicios por y para todos sus miembros. Una sociedad comprometida a seguir creciendo y evolucionando puertas adentro y puertas afuera.
¿Algo más que desee agregar?
En nombre de los que me acompañaron y soportaron durante mi gestión como presidente, las Dras. Ana Stok y Stella Fabio y el Dr. Héctor Altieri, con los pies sobre la tierra y la mirada puesta en ese pasado compartido, asumiendo con humildad las limitaciones y las dificultades típicas que toda sociedad en crecimiento tiene, hoy puedo sostener que nos sentimos orgullosos de haber formado parte de esta CD totalmente Tucumana, un eslabón más de esta cadena cada vez más larga y más fuerte llamada AAMR.